En este sitio, manifestantes mostraron cartulinas con mensajes escritos para denunciar la supuesta venta de droga en el interior del penal, así como maltrato a los internos.
Exigieron la renuncia del secretario de Seguridad Pública estatal, Pedro Almazán.
Por separado, alrededor de las 5 de la tarde, el portavoz del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, informó que la situación al interior del penal de Las Cruces era en calma.
Álvarez Heredia señaló que “al mediodía, internos expusieron inconformidades al director del reclusorio, lo que provocó la alteración momentánea del orden interno”.
Agregó que “hubo jaloneos que propiciaron que la guardia de la Policía del Estado que se encuentra al interior del Cereso, rescatara al director y al jefe de seguridad del penal”.
El vocero indicó que autoridades penitenciarias, como parte de los protocolos, reforzaron medidas de prevención y seguridad, mientras que un helicóptero de Seguridad Pública estatal realizó vuelos de vigilancia, y anunció que se concentrarán más efectivos para garantizar la seguridad de las instalaciones.
Álvarez Heredia señaló que en los hechos no se registraron heridos ni hubo afectación a derechos humanos de los internos.
Refirió que ha sido recurrente la presión de grupos delictivos para que remuevan a las autoridades penitenciarias, de las que señaló, “han trabajado para evitar que sucedan nuevos hechos de violencia”.
Debido a ello, expresó el vocero, autoridades penitenciarias determinaron el traslado de ocho internos, considerados negativos, que han generado inestabilidad al interior del penal.